asilvestradas, por lo que cuando se me propone un ‘plan de monte’ solo acepto
bajo estos dos supuestos: a) estreno de ropa sport chic mediante o b) en la
cima/meta espera alguna joyita arquitectónica: la ermita de San Bartolomé (Soria) fue ‘el
caramelito’ en esta ocasión.
surcado por el río Lobos y rodeado de formas de roca caliza que aún le otorgan
más teatralidad al lugar. Esta combinación tan perfecta entre lo construido y
lo natural se encuentra en el Parque Natural del cañón del río Lobos, cuya
entrada estaba protegida por el Castillo de Ucero que ya visitamos en reharq*
hace casi dos años.

del siglo XIII, en estilo románico muy tardío y sobrio. Posee planta de cruz
latina con crucero más bajo que la nave y con alzados en perfecta sillería.
La puerta meridional tiene seis arquivoltas apuntadas con decoración de
baquetones, puntas de diamante y rosetas, además de seis columnas cuyos
capiteles tiene cabecillas humanas entre flores y hojas«, tal y como
apuntan en arteguías.
motivos que llevaron a su construcción: ¿es acaso una obra templaria?, ¿qué
clase de cultos y rituales realizaban tanto en la ermita como en las cuevas que
la rodean?, ¿realmente equidista del Cabo de Creus y de Finisterre? ^__^…
arquitectura sacan conclusiones sobre la ermita totalmente diferentes, a pesar
de basarse en las mismas -aunque escasas- fuentes.¿Con cuál de las opiniones de los expertos: Miguel Sobrino (Profesor escuela de arquitectura, autor ‘Catedrales’), Eric Álvarez (director de www.iberica_documental.com), Juan
Ignacio Cuesta (periodista y escritor) y José María Capilla (guía turismo Burgo de
Osma) te quedas?
misticismo al tema. Una cueva en la que se cree se celebraban rituales de
carácter pagano desde tiempos prehistóricos y que los prehistóricos del siglo
XXI usan para otros menesteres más escatológicos. Ver para creer (o dejar de
creer en la especia humana… 😉 De no más de 250 metros de profundidad, su entrada encuadra una de las instantáneas más
espectaculares de la ermita de San Bartolomé.
y sin saber yo nada de estas teorías pseudotemplarias o cósmicas el lugar me
invitó a la meditación y a la conexión con la naturaleza. No desaproveché la oportunidad, ¡vete a saber cuándo volvería a acceder a otro patrimonio plan de monte! 😉

Fuentes consultadas: arteguías.com
Genial Libe!!!
Gracias, majetona. No es románico palentino pero "se le parece". Un abrazo!
Es que es de 10 tu entrada! 😉
Chulísimo! Soy una enamorada de Soria!
Bueno, bueno, bueno… está lleno de rinconcitos naturales espectaculares. Creo es un desconocida que causa sorpresa a todo el que la visita.
Ey, ya ha salido #CIEP3 así que ya hay fecha para reencontrarnos, no? 😉
La pregunta es obligada… ¿Hubo estreno de ropa sport chic? Jejeje Bromas aparte da mucho que pensar un edificio con un pasado aún por descubrir… Fantástico!!!
Y de respuesta obligada 😉
En esta ocasión fue suficiente con el incentivo de "en la ruta hay una ermita…". Cai en el bote con todo el equipo.
El comodín de estreno gala montañera lo gastaré en la siguiente propuesta que no incluya una joyita patrimonial tan tentadora, y como bien dices con un pasado aún por interpretar, como la ermita de San Bartolomé. Saludos hasta las afortunadas!
La conozco, es preciosa. Un beso!
Eso es, la ermita junto a su entorno hacen un lugar precioso y un plan perfecto para familias! Gracias por el comentario, Mónica.
Oh! Qué hermosa!
Sobre todo porque difiere mucho de los entornos patrimoniales de México. Lo diferente aporta siempre una dosis extra de belleza…;-)
Abrazo transoceánico, Nicolas!
Qué ganas de ir!
Mira que lo tengo en mi lista desde hace años, pero la has hecho subir al ?.
Gracias a ti y a tu "patrimonio del bueno"!
No es para menos. Ese plan es de los que recarga pilas, si además la ermita estuviera abierta ya sería patrimonio plan top con ascendencia a perfecto.
Cómo me gusta ir "creando necesidades patrimoniales"… 😉
Gracias, Amaia!
Fascinante historia, increíble sitio y lugar. Gracias por esta entrega. Saludos!!
Gracias por tus palabras, SIEMPRE tan amable y generosa, Elsa.
Saludos de vuelta para México!
MECO…
Grazie! Un abbraccio, Cristiana!