razón. El pasado verano, puse
remedio. Imagínate el mix explosivo entre la ciudad más antigua de Europa
(Gádir, 1104 a. C. ) y una blogger de patrimonio dicharachero perdida por sus calles.
industrial, tacita (de plata), atún de almadraba, carnavaal-carnavaaal,
chocolates Pancracio, la cámara oscura de la Torre Tavira, arquitectura de
múltiples estilos… Muchísimo patrimonio del bueno pero por algo hay que
empezar. Así que hagámoslo por mi patrimonio fetiche (y, por lo que veo, el de
muchos de vosotros): los castillos.
construcción militar más antigua de Cádiz.
No siempre se tiene la suerte de estar en ‘una playa con vistas a un castillo’.
Tiene su punto ver cómo el sol va cayendo sobre la fortaleza mientras te das un baño en una de las playas más típicas de la capital,
La Caleta. Una ensenada, denominada originariamente ‘Caleta de Santa Catalina’,
ya que ahí se encontraba una primitiva ermita dedicada a Santa Catalina de
Alejandría.
construida a finales del siglo XVI, por encargo de Felipe II tras el desastroso
asalto anglo-holandés de 1596, siguiendo los planos del ingeniero Cristóbal de
Rojas. De planta estrellada (‘influencia italiana’ *ver sección de comentarios*), supondrá el modelo a seguir
de varios castillos americanos (morro de La Habana o de San Juan de Puerto Rico…).
capilla dedicada a Santa Catalina de Alejandría y a la Purísima Concepción.
Consta de espadaña con volutas, nave con bóveda de cañón y un pequeño coro. La
entrada está rematada por un alerón sobre pilastras de piedra ostionera (roca sedimentaria muy porosa formada por restos de conchas marinas). El
retablo barroco, con columnas salomónicas, es obra de la escuela de Saavedra.
negro en damero, tan típico de Cádiz; así como las lápidas de las tumbas de los
familiares del gobernador del castillo, ya que tenía el privilegio de poder
darles sepultura en el interior de la capilla. Así lo hicieron en 1730, 1851 y
1858, los correspondientes gobernadores.
Catalina en prisión militar para personas de condición superior’ -hasta para
ser preso siempre ha habido clases…-. En ella estuvieron liberales e
independentistas americanos y, en el S. XX, algunos implicados en el golpe de estado del 23 de febrero de
1981._ El castillo fue declarado Bien de Interés Cultural en 1985.
fecha en la que se lo cedió al Ayuntamiento
de Cádiz._ En la actualidad, y tras una rehabilitación (con algunas pegas, en mi opinión, en cuanto a criterios y técnicas de intervención…) esta fortaleza es visitable y se ha convertido en
un espacio cultural y lúdico polivalente.
artísticos y artesanales. Además de la celebración de conciertos y actividades
veraniegas en el patio de armas del Castillo.
regulero… pero yo vuelvo verano sí, y verano también. Contando los días estoy (hoy, restan 57 XD) para volver… 😉
Fuentes consultadas: Federación andaluza de municipios y provincias, Guía de Cádiz, Instituto andaluz del Patrimonio Histórico y los paneles expositivos distribuidos por el castillo.
¡COMPARTE CON EL MUNDO EL PATRIMONIO DEL BUENO! GRACIAS! 😉
¿por qué dices que la planta estrellada es influencia italiana?
mira: Fernando Cobos-Guerra "Pedro Luis Escrivá y el primer tratado de fortificaciónmoderna. Nápoles 1538" en CAMARA, A. y REVUELTA, B. (coordinadores) Ingenieros del Renacimiento. Fundación Juanelo Turriano. Madrid 2014.
http://issuu.com/juaneloturriano/docs/ingenieros_del_renacimiento-issuu_v_41bda1bc1669dd?e=1641776/7670085
Lo de ‘influencia italiana’ es una de tantas equivocaciones que a base de repetirse, sientan cátedra, aunque estén alejadas de la realidad. Y claro, luego es una ardua tarea (tremendo el trabajo de estudio que habéis realizado sobre ‘Escuelas y escenarios de la fortificación española en los siglos XVI, XVII y XVIII’) el ‘desmantelar’ tal afirmación…
Gracias Fernando por el artículo y la recomendación de su lectura:
Tal y como apuntas en el texto, al hablar de la arquitectura militar del Renacimiento, es un error pensar que los grandes ingenieros eran todos italianos. La Administración del Imperio enviaba a los mejores, en muchos casos españoles, como el valenciano Pedro Luís Escrivá, a las zonas donde más se necesitaban. Alucinante el Castillo de L’Aquila, coincido: “la mejor fortificación española, quizás, esté en Italia”.
Además, a los lectores de reharq* también les gustará saber que Pedro Luís Escrivá, es autor del primer tratado técnico del primer período de la fortificación abaluartada (junto con el de Durero) y uno de los ‘ideadores de soluciones’, al mismo nivel que otros italianos como, por ejemplo, Sangallo.
Aunque la denominación ‘a la italiana’ puede dar lugar a equívoco, pues ‘los italianos barren para casa’, cosa mala: hacen propia toda la arquitectura construida en lo que hoy día es Italia (aunque anteriormente correspondiera a ‘otro país’); y, además, también consideran italiana toda la arquitectura hecha por un italiano aunque se encuentre fuera de sus fronteras… 😉
¡Qué curioso que, pese a ser artífices de las fortalezas, los ingenieros figuraran como militares y no como ingenieros (porque el sueldo era mayor)! Uno de ellos, según he leído en las notas del texto, fue Cristóbal de Rojas, autor del castillo que en este post nos ocupa.
Gracias, Fernando. Y felicidades (junto a Joâo Campos) por el Premio Europeo de Intervención en el Patrimonio arquitectónico AADIPA 2015!
Yo en cuanto que veo Cádiz…
("Carlos Cano y el Coro de Julio Pardo – Habaneras de Cádiz")
https://www.youtube.com/watch?v=dvxa2_ZpH0I
Jaja, yo también. Carlos, me parto con tus 'comentarios en formato audio'… Gracias!
Bonita comparación del Castillo de Santa Catalina con marea alta y marea baja (que debió dejar la "fortaleza" poco inexpugnable) … y que si no estoy atento casi lo equivoco con el castillo de San Sebastián (al otro lado de la Caleta).
Pero sí que es verdad Libe, "Si la playa no viene a Mahoma, Mahoma va a la playa…"
La idea era visitar también el castillo de San Sebastián, ya que había una exposición fotográfica titulada 'Americadiz' que tenía muy buena pinta, pero el final del día, sin darnos cuenta, nos sorprendió 'a remojo' en La Caleta. 😉 Para la próxima!